EY analiza las medidas para acelerar la descarbonización de la industria europea
- Para ello, resulta necesario combinar medidas transversales con medidas específicas para los diferentes subsectores industriales.
La Comisión Europea se enfrenta al gran reto de revitalizar la economía de la UE en un entorno geopolítico cambiante y cada vez más complejo. El informe Draghi proporciona una hoja de ruta para el ‘Clean Industrial Deal’, con el fin de que la UE recupere su posicionamiento internacional, mejore su competitividad y reduzca su vulnerabilidad externa derivada de la dependencia del suministro de gas importado. En este contexto, EY analiza las medidas que podrían llevarse a cabo para mejorar la competitividad y acelerar la descarbonización industrial de la UE, destacando la necesidad de combinar medidas transversales para toda la industria con medidas específicas para los diferentes subsectores industriales, en función de su utilización de calor, cuantificando en su caso los incentivos necesarios para ello.
«La descarbonización ofrece una oportunidad única para mejorar la competitividad de la UE y aumentar su seguridad energética. España, con su ventaja competitiva en fuentes renovables, debe aprovechar esta oportunidad para liderar el cambio. Este proceso no solo mejorará la competitividad industrial en Europa, sino que también contribuirá a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero”, ha comentado Marta Sánchez, socia responsable de Energía de EY España.
En este entorno, el estudio de EY analiza las medidas que podrían llevarse a cabo para mejorar la competitividad y acelerar la descarbonización industrial de la UE, destacando la necesidad de combinar medidas transversales con medidas específicas para los diferentes subsectores industriales, en función de su utilización de calor, cuantificando en su caso los incentivos necesarios para ello.
Entre las medidas transversales, destacan las encaminadas a evitar la fuga de carbono o a reducir el coste del suministro eléctrico revisando su fiscalidad y desarrollando más renovables, asegurar en tiempo y coste razonable las conexiones de las industrias a la red eléctrica, el desarrollo de requisitos de contratación pública coherentes con los objetivos de competitividad y medidas efectivas de comercio frente a terceros países.
«El ‘Clean Industrial Deal’ representa una gran oportunidad para mejorar la resiliencia y la competitividad de la industria europea. La clave está combinar medidas transversales para toda la industria con medidas específicas para cada subsector, priorizando a corto plazo determinados procesos industriales que requieren temperaturas inferiores a 500ºC», ha añadido Antonio Hernández García, socio de Sectores Regulados, Análisis Económico y Sostenibilidad en Consulting de EY.
Según el estudio de la Firma, teniendo en cuenta que la demanda de calor industrial representa casi la mitad del consumo energético del sector, es preciso segmentar los diferentes procesos industriales que utilizan ese calor para hacer un buen diagnóstico y proponer las soluciones específicas adecuadas. Determinados procesos de temperatura inferior a 500ºC presentan el mayor potencial de descarbonización a corto plazo a través de la electrificación. Por su parte, los procesos industriales de alta temperatura (>500ºC) requieren desarrollo tecnológico adicional por lo que debe apoyarse el desarrollo tecnológico europea, mientras que los procesos ya electrificados deberían recibir un apoyo encaminado a hacer frente a las presiones competitivas internacionales a corto plazo para asegurar la resiliencia de la economía europea.
Haciendo un análisis de los procesos de los diferentes subsectores, se estima que se podría electrificar en el corto plazo más del 50% de la demanda energética para calor industrial de menos de 500 ºC. Se estima que esta electrificación supondría un “funding gap” de unos 50.000 millones de euros, lo que representaría el 6,5% de las inversiones previstas en el informe Draghi. Dedicando el 20 por 100 de los fondos de las subastas del ETS se podría financiar este monto en 6 años. Esta es una de las principales conclusiones del estudio de EY: “Un ‘Clean Industrial Deal’ eficaz y eficiente para Europa”.
Por último, los expertos de EY concluyen en el estudio que la competitividad industrial y la transición energética no solo son compatibles, sino que pueden fortalecerse mutuamente. Con las inversiones adecuadas y un enfoque estratégico, Europa puede liderar en tecnologías limpias y mejorar su posición competitiva a nivel global.
Fuente: EY